Rosa Elia Doria

Rosa Elia Doria nacio el 16 de febrero de 1962 en Reynosa, Tamaulipas a sus padres Jose Simón y María Del Rosario Ramírez, quienes la preceden en muerte junto con su tia materna Gloria López de Hernández, tios Sebastián López Ojo de Agua, Dominguito López Ojo de Agua, Rogelio López Ojo de Agua, y Aurelio López Ojo de Agua, y sobrina Dessirae Faith Cavazos. Le sobreviven su esposo Javier Doria de Weslaco, hijas Jessica (Marco) y Kassandra Doria, y hermanas Mary (Omar) Perez de La Villa, Rosa Elvia (Marco) Romero de La Villa, Raquel (Moises) Espinoza de Weslaco, y Roxanne (Juan) Pacheco de Weslaco. Le sobreviven sus sobrinas y sobrinos Ariel Rubie Perez, Adrián Ramírez, Dylan Omar Perez, Alexandra Marie Espinoza, Natalie Marie Cavazos, Andrea Rae Espinoza, Sierrah Lynn Perez, Simón Anthony Romero, Breanna Lee Cavazos, Robert Samuel Romero, Audrey Renee Espinoza, Mandy Delanie Cavazos, Nancy Sauceda, Maria Sauceda, Cruz Sauceda Jr., Stephanie Doria, Fabiola Doria, Leslie Doria, Shantel Doria, Erick Doria, Dayanara Doria, Giselle Doria, Abigail Alfaro, Alondra Garcia, Nailea Garcia, Imelda Garcia, Roberto Garcia, Valeria Doria, Martin Doria Jr., y Brisa Doria.

Rosita fue una guerrera. Ella era compasiva, con un corazón que desbordaba y amaba abundantemente a los demás como Dios la amaba a ella. Fue trabajadora, amorosa y generosa. Rosita encarnaba todas las bondades de este mundo. Su fé, perseverancia, humildad y fuerza no conocieron límites. Rosita tocó muchas vidas a través de sus acciones. Ayudó a su mamá a cuidar a sus sobrinas y sobrinos. Cuidaba a los niños como si fueran suyos. Rosita amaba y trataba a los demás con el mayor respeto y compasión.

A Rosita le encantaba cocinar y la jardinería era su especialidad, le encantaban las plantas mucho que hasta les cantaba con mucho amor.. Estaba más en paz cuando se ocupaba de su jardín. Disfrutaba leer la Biblia con su mejor amiga, la Señora López. Ella era muy organizada y ordenada y siempre le encantó rodearse de un ambiente limpio. Se enorgullecía de hacer que los demás se sintieran bienvenidos cuando la visitaban. Rosita fue la fuerza que fortaleció a su familia. Ella era una persona espiritual, una cristiana humilde y devota. Disfrutaba escuchar música cristiana, aprendiendo y tomando notas, y le encomendó al Señor que la guiara a través de sus dificultades. Ella decía “como no puedo darle a Dios gracias por todas mis bendiciones, solamente le ruego a Dios permiso de hacer lo que pueda cada día de mi vida”.

Estuvo casada durante 29 años y tuvo dos hermosas hijas. Diariamente comenzaba su día preparando el desayuno y el almuerzo para su amado esposo Javier. Ella dedicó su vida, amor, tiempo y gracia a sus padres, esposo, hijas, hermanas, sobrinas, sobrinos, amigos y cualquiera que entrara en su vida. Rosita vivió una vida de servicio a los demás, dando de lo mejor que pudo con el corazón y la mente abiertos. Ella ha ganado la victoria y se ha ganado sus alas. El Cielo ha ganado un ángel y por siempre la tendremos en nuestros corazones.

Los portadores del féretro son Juan Pacheco Jr., Marco Israeli Garza, Dylan Omar Perez, Simón Anthony Romero, Robert Samuel Romero, e Erick Doria.